¿Cuál es el primer paso que uno debería dar para poder amar?
Para amar es necesario sentirse a uno mismo, y para sentirse a uno mismo es necesario conocerse a uno mismo. Si quieres amar a los demás aprende primero a amarte a ti mismo, a través de conocerte a ti mismo. El que no se quiere a sí mismo no puede querer a los demás.
¡Pero yo tenía entendido que para amar a los demás tienes que renunciar a ti mismo!
En absoluto. Lo que tienes que hacer es renunciar a tu egoísmo, pero no a tus sentimientos. Lo que ocurre es que tenéis un concepto de lo que es el amor que es incorrecto, porque mezcláis el amor con el egoísmo. Amarse a uno mismo no es creer que uno es mejor que los demás y que por ello ha de dedicarse a satisfacer caprichos egoístas, sino reconocer las necesidades afectivas propias, los sentimientos, y desarrollarlos para que sean el motor de nuestra vida. Por esto he dicho que para amar verdaderamente es tan importante conocerse a uno mismo. Conocerse implica saber distinguir entre lo que sentimos y lo que pensamos, reconocer entre lo que viene de nuestro sentimiento y lo que viene de nuestro egoísmo.
¿Entonces, cómo reconocer lo que es el amor de lo que no lo es?
El amor en su máxima expresión ha de ser incondicional. El que ama verdaderamente no espera nada a cambio y el que actúa por interés no está amando verdaderamente. El amor ha de ser libre, si no, no es amor. No se puede forzar a nadie a amar.
El que quiera amar ha de querer también renunciar al egoísmo. El amor y el egoísmo son conceptos contrarios, incompatibles entre sí, antagónicos. No se puede amar sin renunciar al egoísmo, ya que el egoísmo es en realidad la ausencia de amor. Aprender a amar es lo mismo que aprender a desprenderse el egoísmo. El que aumente su capacidad de amar desminuye su egoísmo y viceversa.
¿Y cómo aprende el espíritu a amar?
Es un proceso continuo que requiere muchísimo tiempo de evolución…………………..
Vicent Guillem Primo es Doctor en Ciencias Químicas por la Universidad de Valencia. Trabaja como investigador en la determinación de la predisposición genética al cáncer y practica Reiki con fines terapéuticos de forma desinteresada.
Hace unos días tuve el placer de volver a escucharle un una de las muchas charlas que está ofreciendo allá donde le requieren sobre el origen emocional de la enfermedad y os puedo asegurar que estéis o no de acuerdo con sus investigaciones, no deja a nadie indiferente.
"muchas enfermedades, y esto incluye muchos cánceres, son la manifestación física de un problema emocional. Detrás de muchos cánceres hay conflictos emocionales muy fuertes, y el cuerpo lo que hace es responder a ese malestar emocional. Si se resolvieran esos problemas emocionales las enfermedades se podrían curar sin necesidad de tratamientos químicos"
El texto que os dejo hoy pertenece a su libro “Las Leyes Espirituales”, publicado sin fines lucrativos y que se puede descargar de manera completamente gratuita en Internet; http;//lasleyesespirituales.blogspot.com
El contenido de este libro es un mensaje de amor para toda la humanidad escrito con todo su amor para todos los que estemos dispuestos a recibirlo.
Desde aquí, os invito a que le echéis un vistazo.